Otro fin de semana

en

No puedo caminar por los abismos que me recuerdan todo lo que no tengo, todo lo que no soy. Ese sentimiento terrible de estar atrapado, de ser quien no soy, o al menos sólo en parte. Porque yo no soy yo (aunque siempre te digo que tú no eres tú). Yo no soy éste que veis. Esta versión mía es la que se ha adaptado a esta situación, diseñada y concebida para hacer felices a otros. Canónica. Maldita.

Pero yo no soy así. Me di cuenta cuando ya era tarde que debí haber luchado por lo que quería.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.