Sigo quejándome de que tantas ocupaciones me han hecho perder mi parte emocional. Ahora es una cuestión de supervivencia casi física, y añoro el deseo, la morriña, la remembranza. Añoro echarte de menos, tanto que casi duele.
En otro orden de cosas, ayer se me estropeó el ordenador tras una actualización fallida, y mi compañía me desactivó el móvil por un cambio de tarjeta. Estuve bastante incomunicado, y un poco preocupado, más que nada por la incomodidad de tener que poner en marcha todo de nuevo. Ahora parece que las aguas van volviendo a su cauce. 6 minutos para ver si he recuperado el correo electrónico…
….jajajaja!!!!…..vaya…vaya……..has cambiando el refrán….creo que decía algo de cuando el dinero no entra por la puerta el amor salta por la ventana…….pero lo del trabajo………como que no…..eh!!!!…..a mi me están constantemente diciendo que el trabajo es salud…….pero no lo veo por ningún lado…….en fin !!!…..seguiré buscando a Salud….